Por Erilda Silva, Investigadora de EmpoderaClima

Desde que el actual presidente de Brasil, Lula, asumió el cargo en enero (2023), dos mujeres en su administración se han convertido en algunos de las jugadoras más poderosos de la política brasileña, liderando agendas importantes sobre los derechos humanos, medio ambiente y clima.

Tener a mujeres en posiciones de poder tiene sentido económico y crea sociedades inclusivas; América Latina ha tenido históricamente una gran tasa de participación política femenina. En Brasil, la ley 1.951/2021 garantiza una asignación mínima de vacantes para candidatos de cada género, promoviendo así una mayor participación femenina en la política brasileña.

Sonia Guajajara and Marina Silva, ambas reconocidas activistas y políticas, desempeñan los roles de Ministra de Pueblos Indígenas y Ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático, respectivamente. Este es un momento histórico para Brasil, ya que marca la primera vez que dos mujeres influyentes son nombradas para puestos de tan alto nivel en el gobierno.

Sonia Guajajara es una reconocida líder y activista indígena que ha estado luchando por los derechos de los pueblos indígenas durante más de dos décadas. Es la fundadora de Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil (APIB), una organización que trabaja para proteger y promover los derechos de los pueblos indígenas en Brasil. Como Ministra, es responsable de garantizar que todos los ciudadanos reciban un trato igualitario y justo ante la ley.

Recientemente, Brasil tuvo la oportunidad de evaluar las repercusiones de lo que el gobierno anterior hizo a los pueblos indígenas. Según los informes de 2021 del Consejo Indígena Misionero (Conselho Indigenista Missionário), la base de datos estadísticas sobre territorio, salud, casos de violencia estatal y mineros ilegales está rezagada. Esta situación ha causado desorden y ha complicado aún más la misión de rectificar las crisis humanitarias que se están produciendo en el territorio yanomami, por ejemplo.

Hasta el momento, el nuevo Ministro de los Pueblos Indígenas participa activamente en las discusiones celebradas en el Acampamento Terra Livre (ATL). La APIB (Articulación de los Pueblos Indígenas de Brasil) avaló la emergencia climática así como la demarcación de tierras de los pueblos indígenas que estuvo estancada durante casi 5 años en el territorio brasileño, más información se puede encontrar en la Carta Abierta del Acampamento Terra Livre 2023. El evento también estuvo marcado por la discusión sobre el nuevo Marco Temporal, al que la comunidad indígena se opone.

Marina Silva es una exsenadora y activista ambiental que ha estado luchando por la protección de la selva amazónica y el medio ambiente durante más de dos décadas. Ganadora de premios, la Ministra recibió los Campeones de la Tierra de las Naciones Unidas, el premio máximo que otorga la organización. También recibió el Premio Goldman, junto con Chico Mendes, por su trabajo para establecer una reserva de 2 millones de hectáreas gestionado por una comunidad tradicional en la Amazonia brasileña. Como Ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático, es responsable de garantizar que se proteja el medio ambiente de Brasil y se promueva el desarrollo sostenible.

Silva también ha sido una firme defensora de la energía renovable y ha criticado abiertamente la dependencia del gobierno brasileño de los combustibles fósiles.

Recientemente, Petrobras propuso explorar yacimientos de petróleo a más de 500 kilómetros de la desembocadura del río Amazonas, y el Instituto Brasileiro do Meio Ambiente e dos Recursos Naturais Renováveis (IBAMA), organismo gubernamental subordinado al ministerio de Marina, rechazó la licencia solicitada por Petrobras. La compañía emitió un comunicado diciendo que pedirán una reconsideración al IBAMA.

De la estructura del Ministerio, antes conocido como Ministerio de Medio Ambiente, se entiende claramente que el cambio climático debía ser un tema prioritario. Marina Silva prometió centrarse en sus primeros 100 días como ministra en la creación de una Autoridad Nacional de Seguridad Climática, que estaría encabezada por el propio Presidente, con la participación de todos los Ministerios- a pesar de eso, a la fecha de publicación de este artículo, no ha sido establecido. Esta Autoridad tiene como objetivo apoyar la Política Nacional de Cambio Climático y regular y monitorear los objetivos de mitigación establecidos.

A través de un evento en las redes sociales en abril, la Ministra garantizó una vez más la creación del Consejo de Cambio Climático, pero sin dar detalles sobre los plazos. Era una promesa más de los primeros tres meses que, hasta ahora, no se había cumplido.

El año pasado se publicó ¿Quién necesita la Justicia Climática? (Quem precisa de Justiça Climática), un libro construido colectivamente con voces poderosas de líderes y especialistas en la discusión sobre el cambio climático. El prefacio del libro fue escrito por Marina Silva, quien planteó que para encontrar una solución a los problemas relacionados con este tema, es necesario redirigir las inversiones financieras en adaptación y mitigación de los impactos ambientales, particularmente para aquellos que son socialmente más vulnerables.

Recientemente, el gobierno brasileño anunció el regreso de varios temas y organizaciones importantes al Ministerio de Medio Ambiente, como la Agencia Nacional de Agua y Saneamiento Básico (ANA) y el Servicio Forestal Brasileño (SFB). Además, se ha reintegrado al portafolio la responsabilidad de la gestión colaborativa de los recursos pesqueros, la promoción de la gestión ambiental en zonas rurales y las políticas para reforzar el papel de los pueblos indígenas y comunidades tradicionales en la administración de sus territorios. Además, se inició la gestión de la Política Nacional de Recursos Hídricos y se inauguró el Departamento para la Protección y Defensa de los Derechos de los Animales.

EL FUTURO DE BRASIL

Recientemente, los dos Ministerios han experimentado intentos de reorganizar la composición adecuada a cada uno. Según la nueva propuesta de ley Medida Provisória 1.154/2023, la Política Nacional de Seguridad Hídrica y la gestión de los recursos hídricos, anteriormente asignadas al Ministerio de Medio Ambiente y Cambio Climático, ahora deberían asignarse al Ministerio de Integración y Desarrollo Regional. 

Además, la decisión presidencial mantuvo el vaciamiento del Ministerio de los Pueblos Indígenas (MPI) sobre el reconocimiento y demarcación de tierras indígenas. La asignación es con el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, tal como lo solicitó la parte centrista del Congreso.

El Registro Ambiental Rural (CAR) fue transferido del Ministerio de Ambiente al Ministerio de Gestión e Innovación en Servicios Públicos, sugerencia del grupo centrista que fue sancionada por el presidente; sin embargo, la última palabra queda en el Congreso, los diputados y senadores que deben votar juntos, aprobando así la decisión que tenga la mayoría absoluta de votos.

Con estas dos mujeres poderosas al frente del gobierno, los brasileños pueden esperar más cambios en los próximos años. En primer lugar, el empoderamiento del Instituto Brasileño de Medio Ambiente y Recursos Renovables ya es evidente, lo que resulta en un mayor empoderamiento de otras agencias de inspección.

El Ministerio de Ambiente y Cambio Climático junto con el Ministerio de Pueblos Indígenas están trabajando en sinergia para promover la protección ambiental y garantizar los derechos de los pueblos indígenas. Un buen indicador de ello es el retorno del Fondo Amazonia, Fundo Amazônia, que había estado suspendido durante cuatro años y fue reactivado con un total de R$ 3,3 mil millones.

El Amazon Fund priorizará proyectos para proteger a las comunidades indígenas, especialmente el ya mencionado territorio Yanomami en Roraima.

Las últimas actividades de ambos ministerios indican un aumento exponencial de la protección ambiental y una disminución de la deforestación sin la militarización del gobierno en la región amazónica, como sugiere Silva.

Con estas dos mujeres al frente de proyectos tan importantes, los brasileños pueden esperar ver un aumento en el número de mujeres en la política. Guajajara y Silva son poderosos modelos femeninos y sus nombramientos en puestos de tan alto nivel sirven de inspiración para otras mujeres interesadas en seguir una carrera en política.

En conclusión, la selección de ambas representa un hito significativo en la historia de Brasil. EmpoderaClima se llena de optimismo y esperanza al ser testigos de este notable progreso en el gobierno brasileño en materia de medidas de mitigación y adaptación al cambio climático. Anticipamos con entusiasmo y seguiremos de cerca las iniciativas y proyectos relacionados con el género y el clima.

Este avance es sin duda una victoria, y estamos entusiasmados de observar la integración del cambio climático y los derechos humanos en el lugar que les corresponde dentro del ámbito de la política brasileña. Particularmente digno de mención es el hecho de que el proyecto está encabezado por mujeres excepcionalmente resilientes e influyentes.

*El 21 de septiembre de 2023, el Supremo Tribunal Federal de Brasil (Supremo Tribunal Federal - STF) determinó el Marco Temporal como una tesis legal inconstitucional, marcando una victoria para las comunidades indígenas.